domingo, 13 de mayo de 2018

MEMORIA EPISÓDICA EN RATAS



En psicología humana hablamos de la memoria episódica como la capacidad de recordar eventos personales específicos contextuales: momentos, lugares, emociones asociadas a ello (no tanto información sobre los hechos, que a eso se le llama memoria semántica). En esto interviene el hipocampo y la parte izquierda de la corteza prefrontal. Parece que el hipocampo almacena este tipo de recuerdos un tiempo reducido, tras el cual se produce una reestructuración neural que los elimina para facilitar la adquisición de nuevos recuerdos y aquellos recuerdos se almacenan en el neocórtex. 
Si perdemos las llaves podemos ir recordando lo que hicimos paso a paso hasta encontrar en nuestra memoria el momento en el que las perdimos. Esta es la memoria episódica. Realmente, si lo pensamos bien, es necesario para dar sentido a todo lo que hacemos porque de lo contrario no podríamos recordar el orden de los hechos que van ocurriendo en nuestras vidas. Durante un tiempo ese recuerdo de la pérdida de las llaves y de lo que hicimos se almacena pero posteriormente va desapareciendo porque no es funcional su almacenamiento. 
Neurocientíficos del Departamento de Ciencias Psicológicas y Cerebrales del IU Bloomington College of Arts and Sciences han entrenado ratas para memorizar una lista de una docena de olores distintos. Las ratas se colocan en un panel con arenas con estos olores y son premiadas cuando identifican el penúltimo o el noveno (el cuarto anterior al último) de la lista de olores. 
Usaron arenas con diferentes patrones para diferenciar qué opción se buscaba y cambiaron el número de olores de la lista antes de cada prueba para confirmar, después de un éxito de casi el 90% en todos los ensayos, que las ratas no identificaban la arena por su olor sino por su posición en la lista y demostraron que, efectivamente, las ratas recordaban toda la lista en orden. Es la evidencia de que las ratas emplean la repetición de memoria episódica exactamente como lo puede hacer cualquier humano. 
Posteriormente se ha confirmado con otros estudios que los recuerdos de las ratas son duraderos y resistentes a la interferencia de otras memorias. E incluso se ha comprobado en experimentación que es el hipocampo el que está realizando esa función. 
No deberíamos tener duda pero es un ejemplo más de que el cerebro de los mamíferos funciona igual, ya sea rata, perro, humano, conejo, oveja o cerdo.